Flan de limón
Después de comer tantos turrones, polvorones, mazapanes... lo que apetece es un postre suave y que no sea nada empalagoso, para ello te traigo este Flan de limón, la verdad es que está de vicio y te garantizo que no te vas a conformar con un trozo sólo.
No te preocupes que es una receta casera de postre muy fácil, no te va a llevar mucho tiempo elaborarlo, yo lo he hecho en un molde grande pero si lo prefieres, puedes hacerlo en moldes individuales, como más te guste, su sabor no va a variar por eso.
Otro postre casero que te recomiendo que no te pierdas y que también es muy fácil de preparar es el Mousse de limón con leche condensada, queda muy suave y encima te ayuda a hacer la digestión por lo que es ideal para después de tantos días de comilonas.
¡ Manos a la masa !
Ingredientes para el Flan de limón
- 500 g Leche evaporada
- 2 Sobres de gelatina de limón
- 150 ml Zumo de limón natural
- 160 g Azúcar
- 250 ml Agua
- 1 Hoja de gelatina
- Ralladura piel de un limón
- Caramelo líquido
Como hacer el Flan de limón
Unta los laterales y el fondo del molde con caramelo líquido, pon la leche evaporada en el congelador para que se enfríe bastante y se monte mejor.
Pon la hoja de gelatina a hidratar y para ello, ponla dentro de agua fría.
En un caldero pon el zumo de limón, el agua, la ralladura de la piel de limón y el azúcar, ponlo a fuego medio hasta que hierva sin remover.
Escurre la hoja de gelatina y añádela.
Ahora añade los sobres de gelatina y ponlo a fuego suave, remueve constantemente hasta que veas que la gelatina se ha disuelto completamente.
Cámbiala a un bol y deja que se temple a temperatura ambiente removiendo de vez en cuando para que no se cuaje.
Pon la leche evaporada en un bol y bate hasta que haya doblado su volumen.
Coge un poco de la leche evaporada montada y añádela a la gelatina y mezcla con movimientos envolventes.
Ahora, la mezcla que has echo de la gelatina y un poco de leche evaporada montada, viértelo en el bol de la leche evaporada montada y mezcla con movimientos envolventes.
Vierte la mezcla en el molde caramelizado, refrigera un par de horas (si es de un día para otro mejor).
Desmolda con cuidado y... ¡ listo para comer !
