Tarta Holandesa
¿Te has fijado que pintaza tiene ésta Tarta Holandesa? pues... no veas que buenísima está, te la recomiendo tanto para celebrar algo como hacerla para postre, es muy fácil de hacer, yo me enamoré a primera vista y como siempre, no pude resistirme a probarla.
Desde que me atreví a hacer una tarta he dejado de comprarlas porque hay recetas caseras fáciles de tartas, comiendo así algo más sano y encima con la satisfacción de que la has hecho tú, sobre todo, cuando le ves las caras a esos invitados que no se creían que eras capaz de hacer algo tan rico jajaja, eso sí, corres el riesgo de que ya no quieran más una tarta comprada como me ha pasado a mi.
Otras tartas caseras que te recomiendo, ya no sólo por buenísimas sino por bonita y fáciles de hacer, Tarta de café y chocolate blanco, una combinación perfecta que no te conformarás con un sólo trozo o Tarta mousse Stracciatella, um... mucho más que deliciosa.
¡ Manos a la masa !
Ingredientes para la Tarta Holandesa
Para la base:
- 400 g Galletas Digestive (o María)
- 100 g Mantequilla
- 2 Cucharadas de leche
- 11-12 Galletas (para los laterales del molde)
Para la capa central
- 400 g Leche condensada
- 25 g Maicena
- 660 ml Leche
- 3 Yemas de huevo
- 25 g Mantequilla
- 400 ml Nata de montar
- 11 Hojas de gelatina neutra
- Esencia de vainilla
Para la cobertura
- 200 ml Nata de montar
- 200 g Chocolate negro
- 100 g Mantequilla
Utensilios
- Molde desmontable de 26 cm.
Como hacer la Tarta Holandesa
Paso 1: Base de galletas
Si quieres, cubre el molde con papel vegetal, no es necesario pero te será más fácil de desmoldar.
Tritura las galletas, puedes hacerlo con un triturador o poniéndolas dentro de una bolsa y escacharlas con la ayuda de un rodillo o botella. Ponlas en un bol.
Derrite la mantequilla y añádesela a las galletas trituradas junto con las cucharadas de leche, mezcla bien.
Cubre la base del molde con la mezcla de las galletas y los laterales con las galletas enteras. Ponlo en el frigorífico mientras preparas la capa central.
Paso 2: Capa central
Pon las hojas de gelatina dentro de agua fría para hidratarlas.
En un caldero (olla) pon la condensada y la maicena, mezcla bien.
Añádele la leche, las yemas,la esencia de vainilla y la mantequilla, ponlo a fuego suave removiendo constantemente hasta que veas que se espesa, unos 15-20 minutos.
Escurre bien la gelatina, añádesela y remueve bien hasta que veas que se haya disuelto.
Ponlo en un bol hasta que se temple, removiendo de vez en cuando.
Semimonta la nata y añádesela poco a poco, removiendo con movimientos envolventes.
Vierte la mezcla en el molde, puedes ponerla un par de horas en el frigorífico o en el congelador si tienes prisa mientras preparas la cobertura.
Paso 3: Cobertura
Pon en un caldero (olla) el chocolate troceado, la nata y la mantequilla.
Ponlo a fuego suave, removiendo constantemente hasta que esté todo bien integrado.
Viértelo con cuidado en el molde y ponla unas 4 horas en el frigorífico para que cuaje bien.
Desmolada con cuidado y... ¡ lista para comer !
